Hace
unos días la sociedad occidental se enteró del secuestro de más de 200 niñas en
un colegio cristiano por un grupo islámico, para ser vendidas como esclavas. Me
surgen muchas preguntas como las siguientes ¿Cómo es posible que nos enteremos
un mes después de que esto ocurra? ¿Cómo es posible que estás barbaridades
ocurran en pleno siglo XXI? ¿Cómo es posible que nadie diga nada ni haga nada?
Se
me ocurre que hay intereses por parte de los gobiernos de estos países para
ocultar estos acontecimientos, para así evitar el deterioro de su imagen
internacional. Qué nadie actúe puede ser por el miedo a las represarías de
estos grupos terroristas y sobre todo para no poner en peligro los negocios
establecidos con estos Estados. Sea lo que sea me parece un acto egoísta por
parte de los dirigentes occidentales hacia los derechos de esas personas.
Además,
el grupo islámico que realizo el secuestro tiene como primicia luchar contra la
educación occidental y considera que las mujeres no deben recibir formación
alguna, puesto que su acometido es ser esposas y servir a sus maridos. Este es
otro de los motivos del secuestro evitar que estas niñas sigan estudiando, recibiendo
una educación occidental y convertirlas en esposas. No entiendo como se permite
en un mundo globalizado en el que se supone que se respetan y que se tienen
hacer respetar los Derechos Humanos esto se permita y nadie haga nada ni diga
nada, teniendo que ocurrir un desastre,
una barbaridad como esta para que se hable sobre este tema y sobre las ideas
anticuadas y bárbaras de muchos grupos islámicos.
En
definitiva, estamos siendo testigos de un avasallo a la educación, a los
Derechos Humanos y nadie mueve un dedo, sino que se trata de ocultar y quitarle
peso al asunto, una verdadera vergüenza.